Cómo el virus Zika destruye las células cerebrales en los fetos

Un grupo de científicos de Estados Unidos afirma haber descubierto cómo el virus Zika mata las células cerebrales en los fetos, lo que consideran un vínculo biológico significativo entre el virus y la microcefalia, una malformación del cerebro en recién nacidos.

0
3016

Las pruebas de laboratorio realizadas en el Instituto Johns Hopkins demostraron que el virus identifica células clave involucradas en el desarrollo cerebral y luego las destruye o desactiva.

El descubrimiento da peso a las afirmaciones de que el virus Zika provoca anomalías cerebrales en los bebés. No obstante, los investigadores estadounidenses advirtieron que su estudio no prueba un vínculo definitivo.

Sólo en Brasil se han registrado más de 4.800 casos confirmados y sospechosos de bebés nacidos con microcefalia. Se cree que la epidemia de fiebre zika es la culpable, pero esto no ha sido comprobado científicamente aún.

La Organización Mundial de la Salud (OMS), que declaró en febrero la epidemia de fiebre zika una emergencia sanitaria global, indicó que existen crecientes evidencias de la relación entre el virus Zika y la microcefalia.

Bruce Aylward, doctor de la OMS, afirmó: “Desde que se declaró la emergencia sanitaria a nivel internacional, la evidencia de que podría haber una relación causal continua acumulándose”.

”No tenemos tiempo para esperar”

En los hacinados hospitales de Recife, la ciudad brasileña ubicada en el epicentro de la crisis, desde hace tiempo que los médicos creen que el virus Zika es el culpable de la microcefalia.

La Dra. Ángela Rocha está convencida del vínculo. Explicó que en un año normal, vería unos cinco casos sospechosos de microcefalia. En los últimos meses, detalló, ha visto más de 200.

Al preguntarle si sería aconsejable esperar a una investigación científica que comprobara el vínculo entre el virus Zika y la microcefalia, Rocha fue categórica: “No tenemos tiempo para esperar”.

Virus matando células

Mediante el uso de células madre humanas cultivadas en laboratorio, los investigadores descubrieron que, de forma selectiva, el virus Zika infecta células que forman la corteza cerebral o la capa externa, haciendo que estas células tengan más probabilidades de morir y menos probabilidades de dividirse normalmente y crear nuevas células cerebrales.

“Los estudios de fetos y bebés con cerebros pequeños y cabezas con microcefalia en áreas afectadas por el virus Zika han encontrado anormalidades en el córtex y se ha encontrado al virus en el tejido fetal”, dijo Guoli Ming, profesora de neurología y neurociencia en el Instituto de Ingeniería Celular del Instituto Johns Hopkins.

“Si bien este estudio no prueba de forma definitiva que el virus Zika causa microcefalia, es muy revelador que las células que forman el córtex sean potencialmente susceptibles al virus y su crecimiento pueda ser interrumpido por el virus”.

El problema y una posible solución

Para su estudio, el equipo de investigadores comparó el efecto del virus Zika en tres tipos de células: células neuronales progenitoras corticales, células madre pluripotentes inducidas y neuronas inmaduras.

Las células madre son creadas mediante la reprogramación de células maduras y pueden dar lugar a cualquier tipo de células en el cuerpo, incluyendo células neuronales progenitoras corticales. Estas últimas, a su vez, dan lugar a células inmaduras.

Hengli Tang, virólogo de la Universidad Estatal de Florida, explicó que tres días después de la exposición al virus, 90% de las células progenitoras neurales corticales “estaban infectadas y habían sido secuestradas para producir nuevas copias del virus”.

“Lo que es peor, los genes necesarios para dar pelea a los virus no se activaron, lo cual es muy inusual”, agregó Tang.

Como resultado, muchas de las células infectadas murieron y otras mostraron expresiones modificadas de los genes que controlan la división celular. Esta última, entonces, terminó fallando.

Hongjun Song, professor de neurología y neurociencia del Instituto de Ingeniería Celular de Jonhs Hopkins, dijo: “Ahora que sabemos que las células progenitoras neuronales corticales son las vulnerables, también podrían ser usadas para buscar rápidamente nuevas y efectivas terapias”.

Puede consultar el artículo completo, en inglés, haciendo clic aquí.

Fuente: REC