- Vacunas y pobreza. En los últimos 20 años, las organizaciones internacionales encabezadas por la Alianza Mundial para el Fomento de la Vacunación y la Inmunización han conseguido que un número significativamente mayor de niños de países pobres de África y de otros lugares reciban las vacunas sistemáticas: 81% hoy en día, frente a 59% en el año 2000.
- Antivenenos. Los envenenamientos por mordeduras de serpientes constituyen un problema de salud pública alertado por la Organización Mundial de la Salud (OMS). Y aunque América Latina tiene una exitosa experiencia en la producción de sueros antiofídicos altamente eficaces para evitar la muerte, la producción local, realizada actualmente por 15 laboratorios en ocho países de la región, atraviesa circunstancias que dificultan su administración en las zonas donde más se necesitan.
- Drogas. Más de 100.000 estadounidenses murieron por sobredosis de drogas en un año durante la pandemia de COVID-19. Es la cifra anual de muertes por drogas más alta jamás registrada en Estados Unidos.