Inicio Blog Página 344

Virus Zika: síntomas, diagnóstico y tratamiento

0

La enfermedad por lo general es leve y presenta síntomas que duran desde varios días hasta una semana. Son raros los casos de enfermedad grave que requieran que el paciente sea hospitalizado.

En mayo del 2015, la Organización Panamericana de la Salud (OPS) emitió una alerta con relación al primer caso confirmado de infección por el virus del Zika en Brasil. El brote en Brasil produjo reportes de casos del síndrome de Guillain-Barré y de mujeres embarazadas que dieron a luz bebés con defectos de nacimiento y que tuvieron problemas durante el embarazo.

Síntomas

  • Aproximadamente 1 de cada 5 personas infectadas por el virus del Zika se enferma (es decir, tendrá zika).
  • Los síntomas más comunes del zika son fiebre, sarpullido, dolor en las articulaciones y conjuntivitis (ojos enrojecidos). Otros síntomas comunes incluyen dolor muscular y dolor de cabeza.
  • La enfermedad por lo general es leve y con síntomas que duran desde varios días hasta una semana.
  • Son raros los casos graves que requieran que el paciente sea hospitalizado.
  • Las muertes por la enfermedad son muy poco frecuentes.

Diagnóstico

  • Los síntomas son similares a los del dengue y del chikunguña, que son enfermedades causadas por otros virus transmitidos por el mismo tipo de mosquitos.
  • Vea a su proveedor de atención médica si presenta los síntomas descritos anteriormente y ha visitado un área donde está presente el virus del Zika.
  • Si ha viajado recientemente, dígale a su proveedor de atención médica adónde y cuándo viajó.
  • Su proveedor de atención médica podría ordenar pruebas de sangre para detectar el virus del Zika u otros virus similares como el del dengue o el chikunguña.

Tratamiento

  • No hay vacunas o medicamentos para prevenir o tratar las infecciones por el virus del Zika.
  • Trate los síntomas:
    • Descanse mucho.
    • Tome líquidos para prevenir la deshidratación.
    • Tome medicamentos, como acetaminofeno o paracetamol, para aliviar la fiebre y el dolor.
    • Se debe evitar tomar aspirina y otros medicamentos antinflamatorios no esteroideos (AINE), como ibuprofeno y naproxeno, hasta que se descarte la posibilidad de dengue para reducir el riesgo de hemorragias. Si está tomando medicamentos para otra afección, hable con su proveedor de atención médica antes de tomar otros medicamentos.
  • Si tiene zika, evite las picaduras de mosquitos durante la primera semana de la enfermedad.
    • Durante la primera semana de infección, el virus del Zika se puede encontrar en la sangre y puede pasar de la persona infectada a otro mosquito si el insecto la pica.
    • Después, el mosquito infectado pueden transmitir el virus a otras personas.

Fuente: Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades

Listado de emisiones anteriores

Jornadas de arbovirosis: dengue, chikungunya y zika 2015

0

Se llevaron a cabo en Buenos Aires, Argentina, del  4 al 5  de noviembre 2015. Preparación y respuesta de los países del Cono Sur.

La transmisión del virus del dengue se interrumpió en gran parte de la Región de las Américas en el decenio de 1970 tras la campaña de erradicación del mosquito Aedes aegypti. Sin embargo, por una suma de condiciones y factores, el vector se reintrodujo en casi toda la región produciendo brotes de variada periodicidad y envergadura, tanto en el Caribe como en Centroamérica y América del Sur. Estas regiones se encuentran ahora en situación hiperendémica, habiendo transmisión autóctona en casi todos los países.

El objetivo general de estas Jornadas fue fortalecer la capacidad de los países del Cono Sur para responder a brotes de arbovirosis, principalmente dengue y chikungunya, con el propósito de minimizar su impacto a corto y largo plazo, teniendo en cuenta la experiencia adquirida en los brotes de dengue.

Dentro de los Participantes

Expertos internacionales, socios técnicos, participantes de país (epidemiología, servicios de salud, laboratorio y control de vectores).

El encuentro fue inaugurado por autoridades del Ministerio de Salud de la Nación y la representante de la Organización Panamericana de la Salud/Organización Mundial de la Salud en Argentina,Dra. Maureen Birmingham.

Presentaciones

Epidemiología del chikungunya: introducción a países de la región.

Moderador: Juan Herrmann. Ministerio de Salud de Argentina

Lecciones aprendidas en la identificación y notificación oportuna del chikungunya

Arbovirosis emergentes: virus zika.

Moderador: Sylvain Aldighieri. OPS

Chikungunya: manifestaciones clínicas y atención en la fase aguda.

Moderador: Juan Berti. Ministerio de Salud

Situación del dengue y medidas de control en las Américas.

Moderador: Jonatan Konfino. Ministerio de Salud

Fase crónica del chikungunya.

Moderador: José Moya. OPS Argentina

Próximos pasos.

Moderador: OPS

Acceda desde aquí a las Jornadas de Arbovirosis en YouTube

Fuente: PAHO

IV Jornadas Bioquímicas de Cuyo

0

El Colegio Bioquímico de San Juan los invita a participar de las IV JORNADAS BIOQUÍMICAS DE CUYO que se llevarán a cabo en la Ciudad de San Juan del 7 al 9 de abril de 2016.

Las Jornadas serán un punto de encuentro para el intercambio de experiencias, las oportunidades de colaboración y favorecer la formación continua de los  profesionales en beneficio de la calidad en el entorno profesional. Habrá una recepción, conferencias, mesas redondas, reuniones y una exposición.

La Exposición Comercial será una excelente oportunidad para promover la mejora de nuestra profesión, la capacitación y formación de los recursos humanos y la optimización de los procesos analíticos. Es por este motivo que los convocamos a ser parte fundamental en el éxito de la organización.

Temas generales que se abordarán

  • Hematología
  • Síndrome metabólico
  • Bacteriología
  • Nefrología
  • Biología molecular
  • Gestión de laboratorio
  • Citogenética
  • Endocrinología
  • Hemostasia
  • Neuroinmunoendocrinología
  • Drogas Terapéuticas
  • Medio Interno
  • lnmunohematología
  • Diabetes
  • Marcadores cardiacos

Informes e Inscripción:

 

Infobioquimica.org no dispone más datos que los aquí publicados.
Por favor, si necesita más información envíe una consulta directa a los organizadores.

Primera Jornada Argentina de Micetomas

0

Las Jornadas se llevarán a cabo los días 20 y 21 de Mayo de 2016.

Lugar: FORUM, Centro de Convenciones – Santiago del Estero, Argentina

Los Micetomas, constituyen en Santiago del Estero (Argentina), una Patología Regional difundida entre los trabajadores rurales, fundamentalmente hacheros, recolectores de leña para carbón, agricultores y mujeres campesinas que juntan leña para su cocina u horno de barro, o que cuidan animales de corral.

Se considera a Santiago del Estero como zona endémica de esta patología, donde en la tierra de determinadas zonas semiáridas y de vegetación xerófila se encuentran los hongos o las bacterias productoras de este proceso infeccioso; las mismas ingresan al organismo por un microtraumatismo con espinas, astillas, clavos, etc. Podemos decir que en estas zonas, cualquier elemento punzo-cortante es un potencial vector para introducir en el organismo a los agentes etiológicos.

Sin duda, hay un sub-registro de esta enfermedad ya que muchas veces no es diagnosticada a tiempo o reciben un sin número de tratamientos que no son los adecuados y llevan a tener secuelas que invalidan a nuestros trabajadores rurales.

Más de la mitad de los pacientes diagnosticados en nuestro país son oriundos de Santiago del Estero, es por ello nuestra preocupación y énfasis en la capacitación a médicos, bioquímicos, agentes sanitarios y demás personal de salud, en especial a los profesionales que trabajan en el interior de la provincia.

Tenemos la fuerte convicción de que este evento científico internacional será un aporte importante a la capacitación de profesionales de nuestra provincia y de todo el Norte argentino.

Principales oradores

  • Prof. Ahmed Hassan Fahal (Sudán) MBBS, FRCS, MD, MS Profesor de Cirugía Facultad de Medicina Universidad de Khartoum, Sudán.
  • Prof. Dr. Alexandro Bonifaz (México) Prof. de la Universidad Nacional Autónoma de México. Médico Dermatólogo del Hospital General de México
  • Dra. Wendy Van de Sande (Holanda) Investigadora del “Departament of Medical Microbiology & Infectious Diseases” en el Erasmus Medical Centre, Universidad de Rotterdam- Holanda.

Acceda desde aquí al Programa de las Jornadas

Informes e Inscripción

Infobioquimica.org no dispone más datos que los aquí publicados.
Por favor, si necesita más información envíe una consulta directa a los organizadores.

El espectro clínico de la aspergilosis pulmonar

0

El Aspergillus es un hongo ubicuo que causa una variedad de síndromes clínicos. Aunque la exposición a conidias de Aspergillus por inhalación es común, sólo una minoría de las personas expuestas desarrollará la enfermedad pulmonar. Las características clínicas, el curso y el pronóstico para las infecciones por Aspergillus dependen en gran medida del grado de compromiso inmunitario del huésped, aunque hay un reconocimiento creciente de la importancia que desempeña la genética. La interacción entre el patógeno y la disfunción inmune del huésped determinan qué síndrome clínico es más propenso a desarrollarse.

En un extremo del espectro, la aspergilosis invasiva (IA) afecta principalmente a pacientes con defectos graves en la función inmune, como aquellos con trasplante de células madre hematopoyéticas (HSCT) o receptores de trasplante de órgano sólido, y los pacientes que reciben quimioterapia o que toman corticoides. La aspergilosis pulmonar crónica (CPA) se presenta de una manera más indolente, que suele afectar a los pacientes con enfermedad pulmonar subyacente, con o sin un sutil compromiso inmunológico generalizado. De manera reciente se redescubrió la bronquitis por Aspergillus en los pacientes con fibrosis quística (CF), y bronquiectasias en especial, así como en los receptores de trasplante de pulmón y los ventilados en las unidades de terapia intensiva. Por último, una respuesta alérgica al inhalar Aspergillus resulta en la aspergilosis alérgica broncopulmonar (ABPA) y asma grave por la sensibilización a los hongos.

El Aspergillus fumigatus es la especie más común implicada en todos los síndromes pulmonares, aunque también el Aspergillus flavus es la causa más común de varias formas de rinosinusitis alérgica, aspergilosis posoperatoria y queratitis micótica. El Aspergillus terreus es una causa común de la IA en algunas instituciones y es resistente a la anfotericina B. El Aspergillus niger es una causa ocasional de IA o bronquitis por Aspergillus, pero también es el colonizador más común del tracto respiratorio.

De manera reciente, se hicieron varios avances para comprender el espectro clínico de la infección por Aspergillus, con una capacidad diagnóstica mejorada. En esta revisión, se presentan los síndromes clínicos de la enfermedad pulmonar causada por Aspergillus y se discuten los temas más importantes para su tratamiento.

Aspergilosis Invasiva

La aspergilosis invasiva implica la invasión del tejido pulmonar por hifas como se demuestra en la histología. La presentación clínica es relativamente rápida, y va desde unos días a unas pocas semanas. Se estudió de manera amplia en el huésped neutropénico; sin embargo, cada vez es más reconocida en pacientes sin neutropenia.

Huésped neutropénico

El factor de riesgo clásico para la IA es la neutropenia, y la probabilidad de IA se correlaciona con su duración y profundidad. Las plaquetas también pueden ser importantes en la defensa contra la IA, y la trombocitopenia tiende a ser paralela a la neutropenia. La angioinvasión está involucrada con la patogénesis en huéspedes neutropénicos y es responsable de la mayor frecuencia de diseminación hacia otros órganos, como la piel, el cerebro o los ojos (figura 2). Los pacientes sometidos a HSCT alogénico y pacientes con neutropenia prolongada después de la quimioterapia están en mayor riesgo de ser afectados por una IA. Se revisó de manera amplia la IA en pacientes con neutropenia.

Huésped no neutropénico

La IA se presenta en una amplia gama de huéspedes no neutropénicos. El factor de riesgo unificador más común es el uso de corticoesteroides, a menudo antes de su ingreso en el hospital. Se reconoce a la IA en los receptores de trasplantes de órganos sólidos (en particular los receptores de trasplante de pulmón y corazón-pulmón), pacientes con SIDA, EPOC, los pacientes gravemente enfermos de la unidad de cuidados intensivos (UCI), los pacientes con insuficiencia hepática y aquellos con enfermedad granulomatosa crónica. En estos huéspedes, en contraste con los pacientes con neutropenia, la angioinvasión no es una característica común (figura 2). La fiebre es poco común, y los síntomas están a menudo ausentes hasta tarde en el curso. La evolución en el tiempo por lo general refleja la inmunosupresión neta. Muchos casos son relativamente indolentes y la condición progresa en el transcurso de semanas en lugar de días. La falta de angioinvasión en las imágenes se asoció a un curso clínico más prolongado y el diagnóstico retrasado en pacientes con trasplante cardíaco.En consecuencia, a menudo el diagnóstico no se detecta por los síntomas y las imágenes no específicas. Por ejemplo, más de la mitad de los pacientes con cirrosis hepática y IA se diagnosticaron post mortem. La IA es el diagnóstico equivocado más común relacionado con infección en la autopsia en pacientes de UCI.

Receptores de trasplante de pulmón

La aspergilosis es la infección fúngica más común en los receptores de trasplante de pulmón. En un estudio reciente de sobrevida de los receptores de trasplante de órgano sólido, la IA representó 44% de todas las infecciones fúngicas en pacientes con trasplante de pulmón, que es mucho mayor que lo observado en otros trasplantes de órganos sólidos, con excepción de los trasplantes de corazón. La enfermedad traqueobronquial es la manifestación más temprana y más común, por lo general, se diagnostica cuando se notan ulceraciones o seudomembranas en la broncoscopía de seguimiento o en la broncoscopía diagnóstica para síntomas tales como fiebre, tos y sibilancias. La enfermedad pulmonar invasiva tiende a ocurrir más tarde y después del trasplante, y puede asociarse con diseminación a otros órganos.

La profilaxis consiste en anfotericina inhalada o voriconazol o itraconazol oral y se emplea de manera habitual en los pacientes de trasplante de pulmón con factores de riesgo para el desarrollo de la IA. El factor más importante es la colonización previa al trasplante o postrasplante; este último fue un factor independiente de la mortalidad en un estudio retrospectivo. Otros factores de riesgo son la inducción con alemtuzumab o timoglobulina, trasplante sólo pulmonar, infección por citomegalovirus, hipogammaglobulinemia y el rechazo al uso de un anticuerpo monoclonal. En un estudio de pacientes con fibrosis quística sometidos a trasplante, un cultivo intraoperatorio positivo se asoció con un riesgo cuatro veces mayor de IA.

El paciente crítico

La IA se describe cada vez más en la UCI, lleva una mortalidad hospitalaria alta y se asocia con costos significativos. La mayoría de los pacientes con IA en la UCI no tienen neutropenia y tienen factores de riesgo no específicos, como la EPOC, el uso de esteroides, múltiples regímenes de antibióticos previos, insuficiencia renal o hepática y diabetes. Muchos de los casos siguen a un episodio de sepsis, probablemente debido a la llamada “inmunoparálisis”. El uso generalizado de esteroides por exacerbaciones de la EPOC puede contribuir al aumento de la tasa de IA. En un estudio multicéntrico de los EE.UU. que excluía a los pacientes con los factores de riesgo clásicos, 77% de los pacientes gravemente enfermos con IA recibió dosis altas de esteroides durante su hospitalización. De manera reciente, se reportaron casos que ocurren después de la infección grave con H1N1 y después del uso de oxigenación por membrana extracorpórea. En algunos casos, las IA de los pacientes ingresados en la UCI se atribuyó a la contaminación por Aspergillus en los filtros de aire. Con mejor cuidado de soporte que prolongue la supervivencia en pacientes en estado crítico, es probable que la incidencia de la IA aumente.

El diagnóstico de la IA en la UCI no es sencillo y se puede retrasar por varios días debido a la falta de sospecha clínica. Las imágenes por lo general no son específicas, muestran la consolidación, los infiltrados en parches, la cavitación o los nódulos, y puede ser complicado por la coexistencia de hallazgos como atelectasias, derrame pleural o síndrome de distrés respiratorio del adulto. La participación traqueobronquial está presente en un subconjunto de pacientes, y rara vez puede estar presente sin enfermedad parenquimatosa. La broncoscopía puede revelar la presencia de seudomembranas.

Huésped sano

Se reportaron casos de IA en huéspedes normales después de una extensa exposición ambiental a las esporas de Aspergillus, en forma de heno mohoso, virutas de corteza de árbol, estar a punto del ahogamiento o la inhalación de polvo en una fábrica de setas. Arendrup et al reportaron dos casos de IA que se produjeron en 1 día de trabajo de jardinería que implican trabajar con corteza de árbol, aunque los síntomas pueden retrasarse una semana o dos. La fuente de infección puede estar húmeda o visiblemente mohosa. La imagen es la de una neumonía intersticial grave o una imagen de tipo miliar aunque puede desarrollarse la cavitación. Esta presentación clínica puede confundirse con la alveolitis alérgica extrínseca (AAE), que conduce a un tratamiento inadecuado con esteroides que resulta en el deterioro clínico.

Métodos diagnósticos

Aunque se acumula experiencia con las pruebas de diagnóstico, tales como el cultivo de hongos, galactomanan (GM) o PCR en pacientes con neutropenia, existe menos evidencia en huéspedes no neutropénicos. Las muestras respiratorias son mejores que las de sangre para todas las pruebas, excepto ß-D-glucano. Hay varios estudios que documentan la utilidad del GM en el lavado broncoalveolar (BAL) y PCR para el diagnóstico de la aspergilosis en pacientes con trasplante de pulmón. La sensibilidad del GM varía de 60% a 93%, de acuerdo al valor de corte utilizado, mientras que la PCR para A. fumigatusespecífica y panfúngica tuvieron una sensibilidad de 85% y 100%, de manera respectiva. Ambas pruebas tienen una mejor sensibilidad que la de la microscopía directa y el cultivo de hongos, que es por lo general menor de 50%. El GM en el BAL también puede ser útil como factor pronóstico, y un índice ≥2.0 se asoció con un peor pronóstico en los pacientes que no eran neutropénicos. Por el contrario, el GM en suero pero no en el BAL ayudó a predecir el pronóstico en pacientes con HSCT. La PCR en esputo puede ser útil; hay pocos datos sobre el GM en esputo. Entre los pacientes gravemente enfermos con EPOC, GM en el BAL en un corte de 0.8 fue más sensible que el cultivo de hongos o GM en suero para el diagnóstico de IA.La evidencia sugiere que GM en el BAL puede tener una sensibilidad comparable tanto en pacientes no neutropénicos como en pacientes con neutropenia, mientras que el GM en suero parece ser menos sensible. La realización de más de una prueba (cultivo de hongos, GM y PCR) puede aumentar la sensibilidad sin comprometer la especificidad. Como los pacientes gravemente enfermos se someten por lo común a métodos de diagnóstico invasivos como BAL, un problema frecuente es la interpretación de un cultivo positivo de Aspergillus o de una prueba de GM. Más de una prueba positiva suele ser una indicación de la enfermedad, mientras que dos pruebas negativas de muestras respiratorias casi siempre lo descartan. En un estudio de cohortes de pacientes críticamente enfermos con aislamiento de Aspergillus, 83 de 172 pacientes se clasificaron con IA definitiva o probable. Por lo tanto, el aislamiento de Aspergillus en la UCI debe ser seguido por otras investigaciones, como una tomografía computarizada de tórax, y la evaluación de riesgos. El uso de un algoritmo clínico puede ayudar a distinguir entre la colonización y la enfermedad. Mientras que la IA es a menudo no específica de manera radiológica, son distintivos nódulos, cavitación y áreas en la base pleural de aparente infarto. Ciertamente, el valor predictivo positivo del aislamiento de Aspergillus es mayor en cuanto más inmunocomprometidos están los pacientes.

Aspergilosis Pulmonar Crónica

La CPA sólo de manera reciente se reconoció como una carga significativa para la salud global y su incidencia apreciada. Se asocia con una significativa morbilidad y mortalidad y la estrategia de tratamiento óptimo no está bien definida. Debido a la frecuencia de recaída, el tratamiento es a menudo a largo plazo o de por vida y por lo tanto puede limitarse por los efectos secundarios intolerables o al desarrollar resistencia.

La CPA casi siempre afecta a los pacientes con algún tipo de patología respiratoria subyacente que da lugar a la formación de una cavidad o bulla. A nivel mundial, el factor predisponente más común para la CPA es la tuberculosis tratada de forma previa. Otras asociaciones incluyen la infección por micobacterias atípicas, EPOC, bronquiectasias, sarcoidosis, cáncer de pulmón con tratamiento previo, ABPA y neumotórax. Muchos pacientes tienen más de una condición subyacente.

La proporción de pacientes con CPA con tuberculosis previa varía de 15.3% en Manchester, Reino Unido a 93% en Corea. La persistencia de cavidades pulmonares en la radiografía de tórax 6 meses después del tratamiento exitoso de la TB fue de 21% en los mineros de oro de Sudáfrica y 23.3% en un estudio norteamericano. Los aspergilomas se detectaron en 14% de los pacientes tratados por TB y un año después el esputo se convirtió en negativo y a los 4 años en 22%, mientras que las precipitinas para Aspergillus estaban positivas en 25% después de un año, según un estudio anterior del Reino Unido. Estas tasas son una subestimación, ya que al utilizar tomografías computarizadas se mostraron tasas de cavitación residuales de más de 30%, y la cavitación después de TB resistente a los múltiples fármacos puede ser aún más alta. Con esta información, el modelo previsto de la prevalencia mundial de la CPA, como consecuencia de la tuberculosis es de 1,2 millones de personas.

En la mayoría de los entornos de bajos recursos, la CPA puede ser poco reconocida como una complicación de la tuberculosis tratada de forma previa, y algunos de estos pacientes pueden ser mal diagnosticados al tener una recurrencia de la tuberculosis, las dos condiciones tienen síntomas muy similares. En un estudio realizado en Uganda, más de la mitad de los pacientes continuaron con uno o más síntomas crónicos tales como fatiga, falta de aire, dolor en el pecho y tos, un promedio de 44 meses después del tratamiento exitoso de la tuberculosis, y esto fue cierto para los pacientes positivos para el VIH y los pacientes negativos para el VIH. De manera curiosa, la disnea se reportó con mayor frecuencia por los pacientes que vivían en las viviendas tradicionales de paja que en los que vivían en los edificios modernos, lo que sugiere la exposición a hongos.

Además, existe una fuerte asociación entre la infección por micobacterias no tuberculosas (NTM) y CPA. En una encuesta de un área de baja prevalencia de TB (Manchester, Reino Unido), una NTM previa era tan común como la tuberculosis previa. La NTM puede preceder o presentarse de manera simultánea con la CPA. La razón de esta asociación no está clara, pero es probable que la condición pulmonar subyacente predisponga a la infección por ambos patógenos y, además el daño del parénquima pulmonar causado por la aspergilosis (cavidades, bronquiectasias) aumenta la susceptibilidad a la infección por NTM y viceversa. Una serie de casos de pacientes con bronquiectasias subyacentes mostró que los pacientes con infección por NTM eran más propensos a tener una serología positiva para Aspergillus que los pacientes sin NTM. Las especies habituales de los informes de casos y series de casos de NTM y CPA son Mycobacterium avium, M. xenopi, M. kansasii y M. malmoense. La relación clínica habitual es la falta de respuesta o el deterioro clínico o radiológico durante el tratamiento de la NTM. El tratamiento de la coinfección es difícil debido a los cursos prolongados requeridos, las interacciones de los medicamentos y el perfil de la frecuencia alta de efectos secundarios negativos. En estos casos, a menudo se elige tratar primero la condición que se cree que contribuye más a los síntomas del paciente.

La aspergilosis complicó a 2% de los pacientes con sarcoidosis en una clínica especializada en los EE.UU., según la radiología, sin serología de IgG para Aspergillus. Todos los pacientes tenían la enfermedad en etapa 4 en las imágenes, que se caracteriza principalmente por la participación del lóbulo superior, fibrosis significativa y cavitación. La mayoría de las series de casos describen los malos resultados, lo que probablemente refleja la etapa avanzada de la sarcoidosis cuando se diagnostica la CPA, y la necesidad del uso continuo de esteroides. Aunque la hemoptisis es rara en la sarcoidosis, es probable que la aspergilosis sea la causa más común.

Presentación clínica y formas de la enfermedad

Los pacientes con CPA suelen ser de una edad media, con mayor frecuencia varones, y se presentan con síntomas constitucionales (pérdida de peso, malestar general, sudoración, anorexia), tos productiva crónica, falta de aire, dolor en el pecho y ocasionalmente hemoptisis. Esto último indica la presencia de un aspergiloma. Los hallazgos radiológicos incluyen cavidades pulmonares con o sin un aspergiloma, infiltrados, nódulos y diversos grados de fibrosis de pulmón o pleural. La prueba diagnóstica es la IgG específica para Aspergillus (o precipitinas) apoyada por la evidencia de Aspergillus en cultivo de esputo o PCR, o biopsia/aspiración.

Entre los pacientes con CPA, se reconocen diferentes patrones de presentación y la evolución en el tiempo. Estos patrones se ven afectados por respuesta del huésped, que puede ser modulada por diversos factores genéticos posibles y por inmunosupresión en ese momento.

Los sujetos con algún grado de inmunosupresión (por ejemplo, el SIDA, el tratamiento con corticosteroides, diabetes mellitus, alcoholismo) pueden presentar un desarrollo más rápido de los síntomas (es decir, semanas en lugar de meses), y con un patrón radiológico de nódulos, consolidación con o sin una cavidad de aislamiento con paredes delgadas, y una evolución más rápida de la enfermedad con el tiempo. Este patrón se denomina aspergilosis invasiva subaguda (SAIA) o aspergilosis pulmonar necrosante crónica.

Otro patrón más común es el de la evolución lenta de las cavidades pulmonares simples o múltiples, por lo general con paredes gruesas y con o sin un aspergiloma, y con la fibrosis pleural concomitante. Esta forma se denomina aspergilosis pulmonar cavitaria crónica (CCPA) y aparece en pacientes que no están inmunocomprometidos de manera abierta (figura 3). A pesar de la ausencia de compromiso inmunológico, se relacionan defectos sutiles como polimorfismos de lectina de unión a manosa, defectos del surfactante, polimorfismo en el factor de crecimiento transformante β o deficiencia de interferón con la patogénesis de esta forma de CPA. La evolución radiológica en el transcurso del tiempo es lenta y puede tardar varios años, y puede confundirse de manera inicial con otras enfermedades como la tuberculosis (figura 4). En algunos casos de CCPA, en especial si no se trata, se puede desarrollar con el tiempo fibrosis pulmonar extensa, unilateral de manera característica, y puede involucrar todo el pulmón (figura 3). Estos pacientes se clasifican como aspergilosis pulmonar fibrosante crónica.

Estas tres formas de CPA no son entidades separadas y una puede evolucionar a la otra con el tiempo. Por ejemplo, la CCPA puede evolucionar a SAIA con inmunosupresión en curso (por ejemplo, dosis altas de esteroides) y la SAIA de manera eventual puede evolucionar hacia CCPA con la terapia antifúngica.

Aspergiloma

Los aspergilomas son conglomerados redondeados de hifas fúngicas, fibrina, moco y residuos celulares que surgen en las cavidades pulmonares, como una manifestación tardía de la CPA. El riesgo de desarrollar un aspergiloma en una cavidad de >2 cm de diámetro es de 15-20%. Si hay una lesión solitaria, estable durante meses con o sin síntomas mínimos, se diagnostica un aspergiloma simple (figura 3). Por el contrario, los “aspergilomas complejos” son en realidad CCPA, y se debe tratar como tal, es decir, por vías médicas, si es posible. La complicación más grave del aspergiloma es la hemoptisis, que tiene el potencial de ser mortal. La probabilidad de desarrollar resistencia a los azoles en la terapia puede ser mayor si está presente un aspergiloma.

Nódulos por Aspergillus

Los nódulos por Aspergillus son por lo general hallazgos incidentales en la TC y su principal importancia clínica se encuentra en su similitud con las lesiones malignas (figura 3). Como resultado, el diagnóstico de un nódulo de Aspergillus se hace por lo general después de la biopsia de escisión. No está claro si el tratamiento está indicado si son asintomáticos; es apropiado el seguimiento serial con TC de dosis bajas/limitadas.

Tratamiento

Con frecuencia se complica el tratamiento de los pacientes con CPA por la presencia de comorbilidades, como la EPOC avanzada que conduce a la reducción de la reserva del pulmón, y coinfecciones tales como NTM. Un deterioro significativo en el estado de salud puede observarse al inicio del estudio. Los objetivos del tratamiento son aliviar los síntomas, prevenir o limitar la hemoptisis y prevenir la formación de fibrosis. Debido a la cronicidad de la infección, el beneficio clínico no se aprecia hasta después de varias semanas en el curso del tratamiento. Además, los antifúngicos pueden conducir a la recurrencia o la exacerbación. Se necesita un enfoque multidisciplinario que involucre a los especialistas en enfermedades infecciosas y neumólogos, cirujanos torácicos, enfermeras y fisioterapeutas.

Los azoles son la opción inicial de tratamiento. El itraconazol es por lo general la primera opción debido a su costo, seguido por voriconazol y posaconazol. Varias series de casos mostraron tasas de respuesta >50% para el itraconazol y el voriconazol. De manera reciente, se encontró que el posaconazol también es eficaz, e incluye una proporción de pacientes que fracasaron con otros azoles. En un estudio longitudinal de tratamiento con azoles que evaluó el estado de salud mediante el Cuestionario Respiratorio de San Jorge, aproximadamente 40% de los pacientes mejoraron en 3 meses, y esta proporción aumentó a los 6 meses y 12 meses a cerca de 50%. Entre los pacientes que permanecieron con el mismo antifúngico durante un año, los resultados fueron ligeramente mejores con posaconazol, seguido por voriconazol. Hubo una mayor proporción de pacientes que reportaron un deterioro con el itraconazol, pero esto se puede atribuir a los efectos secundarios.

Un enfoque diferente puede ser necesario para diferentes formas de CPA. En un estudio prospectivo del uso de voriconazol durante 6-12 meses, los pacientes con SAIA y CCPA demostraron diferentes respuestas al tratamiento. Aunque la respuesta clínica fue similar, se observó una mejoría radiológica total o parcial en 41% de los pacientes con CCPA y de 79% de los pacientes con SAIA, y la respuesta serológica fue más común en la SAIA. Cadranel et al especularon que esto puede explicarse por el carácter más invasivo de la SAIA que hace que los organismos fúngicos se expongan con más facilidad a los antifúngicos, mientras que en la CCPA los hongos están presentes dentro de las paredes de la cavidad donde los antifúngicos pueden no ser capaces de penetrar. Por lo tanto, los pacientes con SAIA pueden requerir un tiempo más corto de tratamiento en comparación con los de CCPA. Por el contrario, Tsubura mostró que el itraconazol puede lograr la concentración adecuada dentro de los aspergilomas. Si se interrumpe el tratamiento, es común la recaída en la CCPA. El tratamiento óptimo de los pacientes que desarrollaron una fibrosis significativa (aspergilosis pulmonar fibrosante crónica) no está definido, pero los antifúngicos probablemente se deben continuar de manera indefinida para evitar un mayor daño en los pulmones.
Para la mayoría de los pacientes con CPA, por lo general se necesita una administración prolongada, y los efectos secundarios pueden llegar a ser una limitación importante en el tratamiento. Los azoles pueden resultar en toxicidad hepática y neuropatía, el itraconazol puede causa edema periférico, hipertensión e insuficiencia cardíaca, y el voriconazol puede asociarse con fotosensibilidad. Si el uso de voriconazol se continúa a largo plazo a pesar de la presencia de una erupción cutánea, pueden desarrollarse lesiones precancerosas.

El posaconazol es una opción para los pacientes con intolerancia o en los que fallan el itraconazol o el voriconazol. Hasta ahora estaba disponible como una suspensión líquida; sin embargo, ya está disponible una formulación de comprimido y muestra una mejor farmacocinética que permite la administración una vez al día sin restricciones con los alimentos.

El desarrollo de resistencia es una complicación importante de la terapia antifúngica prolongada. Esto no es fácil de apreciar ya que la sensibilidad del cultivo es relativamente baja; por lo tanto, las sensibilidades a menudo no están disponibles. Sin embargo, 50% de los pacientes tuvieron evidencia de resistencia detectada por métodos moleculares de muestras respiratorias. Se esperaría que los pacientes portadores de cepas resistentes respondieran mal a la terapia antifúngica y las tasas altas de mala respuesta al tratamiento pueden explicarse por la resistencia no detectada. El uso de métodos moleculares para detectar mutaciones de resistencia a partir de muestras respiratorias puede utilizarse en el futuro para guiar las decisiones de la terapia.
Para los pacientes en los que falla o son intolerantes a la terapia con azoles, se puede utilizar el tratamiento intravenoso con equinocandinas o anfotericina B. Se encontró que la micafungina es tan eficaz como el voriconazol en un estudio que se realizó en Japón. De manera típica, se usa en un periodo de 3 a 4 semanas, y se puede repetir según la respuesta clínica. Se puede utilizar una terapia de mantenimiento con un azol entre dichos periodos. La inhalación de anfotericina B no se recomienda ya que no existen datos sobre la eficacia y puede causar broncoespasmo. El interferón proporcionó beneficios en los pacientes con respuestas inmunes mediadas por interferón cuando fracasó el tratamiento con azol.

Los aspergilomas simples o complejos con enfermedad localizada pueden tratarse de manera quirúrgica en pacientes con una reserva respiratoria adecuada, aunque ésta es una opción en una minoría de los casos. Los resultados quirúrgicos son mejores con un aspergiloma simple que con el complicado. El procedimiento más común que se realiza es la lobectomía. Se puede indicar un enfoque toracoscópico para algunos pacientes, y puede conducir a una hospitalización reducida; sin embargo, puede ser necesario convertirla en una toracotomía completa debido a adherencias intrapleurales.

Aunque no se estudió, la terapia antifúngica preoperatoria y postoperatoria se emplea de manera habitual en el aspergiloma simple. El fundamento es para evitar la propagación de organismos fúngicos en la cavidad pleural durante el procedimiento, lo cual, puede resultar en un empiema por Aspergillus. Si se observa un derrame del contenido de la cavidad, se recomienda un curso postoperatorio de hasta 12 semanas. Además, se puede utilizar el lavado pleural con anfotericina B o taurolidina al 2%, aunque la eficacia no está comprobada. La taurolidina resultó ser activa in vitro contra todos los Aspergillusaislados de los pacientes que se sometieron a una cirugía para los aspergilomas, y se utiliza para la descontaminación pleural durante la cirugía.El riesgo de recurrencia es de aproximadamente 25%, probablemente debido a una combinación de la enfermedad pulmonar subyacente y la predisposición genética.

Por desgracia, la recaída es común en la CPA después de que se dejan de usar los antifúngicos, en especial en aquellos con más de un lóbulo afectado. Por lo tanto, la supresión a largo plazo en lugar de curar es la meta en la CPA. Las tasas altas de mortalidad se describen en un análisis retrospectivo, 27% murió durante un seguimiento promedio de 30 meses de duración, mientras que una mortalidad de alrededor de 50% a los 5 años se reportó en otro estudio. El peso corporal bajo resultó ser un factor importante para predecir la mortalidad en ambos estudios.

Aspergilosis Traqueobronquial

La bronquitis por Aspergillus puede ser la responsable de un subgrupo de pacientes inmunocompetentes con evidencia de Aspergillus (ya sea microbiológica o serológica), pero sin la enfermedad del parénquima pulmonar. Estos pacientes tienen por lo general un historial de infecciones pulmonares recurrentes que se tratan sin éxito con antibióticos y el aislamiento repetido de Aspergillus en el esputo o PCR positivo. Se puede observar una buena respuesta a los antifúngicos, pero puede ser seguido por una recaída. En algunos pacientes, la broncoscopía muestra una invasión localizada de hifas. La aspergilosis traqueobronquial en los receptores de trasplante de pulmón y en pacientes de UCI se menciona tal como en esta revisión en otros lugares.

Enfermedad alérgica por Aspergilus

Papel en el asma y la fibrosis quística

La aspergilosis está implicada en la exacerbación del asma, y se detectó un aumento de las concentraciones de esporas de Aspergillusen el aire interior de una muestra de los hogares de los pacientes con empeoramiento de los síntomas del asma. Aunque, normalmente los conidios fúngicos inhalados se eliminan de las vías respiratorias, la eliminación defectuosa en los pacientes con asma y CF permite la germinación de los conidios de hifas, lo cual, induce a la producción de citocinas proinflamatorias que son las responsables del desarrollo de los síntomas.

La ABPA es la forma más común de micosis broncopulmonar alérgica, aunque, otros hongos pueden causar el síndrome. La hipersensibilidad a Aspergillusse refleja en los niveles elevados de IgE específica al Aspergillus o mediante una prueba cutánea positiva a Aspergillus. Se manifiesta como un asma mal controlada, y otros síntomas son hemoptisis, fiebre, malestar general y expectoración de tapones mucosos. Aunque se reconoce con frecuencia baja, es importante diagnosticar esta condición, ya que puede conducir a un daño permanente a los pulmones por medio del desarrollo de bronquiectasias si no se trata.

De manera reciente, los criterios diagnósticos y de clasificación se revisaron por el grupo de trabaja de ABPA que complica al asma de la Sociedad Internacional de Micología Humana y Animal (figura 5). Una IgE específica a Aspergilusse utiliza como prueba de detección; una IgE total >1,000 UI/mL se utiliza entonces como un criterio de diagnóstico para la ABPA en el asma. No hay consenso en cuanto a los valores de corte para las pruebas serológicas de diagnóstico; Agarwal et al de manera reciente propusieron valores de corte para la IgE total, la IgE específica a Aspergillusy el recuento de eosinófilos de acuerdo al análisis de una población con ABPA en el asma en la India. Los valores de corte pueden diferir en la ABPA en el asma complicada o la CF; Baxter et al de manera reciente propusieron cortes para los pacientes con CF. Un subgrupo de pacientes con asma grave no podrá cumplir con los criterios para ABPA, pero todavía puede beneficiarse de un tratamiento antifúngico y se clasifican como asma grave con sensibilización de hongos. Los hallazgos radiológicos en la ABPA incluyen infiltrados transitorios, nódulos, tapones de moco y bronquiectasias centrales. El engrosamiento pleural, la fibrosis y el aspergiloma pueden desarrollarse como ABPA y puede complicarse por la CPA.

El tratamiento de la ABPA tiene como objetivo prevenir la bronquiectasia progresiva, así como la fibrosis de pulmón en los que se desarrollará CPA. Los corticoesteroides se utilizan en diferentes regímenes, y se disminuyen durante varias semanas o meses. Como la disminución en el uso de esteroides puede conducir a un regreso de síntomas, los azoles se utilizan en pacientes con exacerbaciones frecuentes con el fin de disminuir la carga fúngica y la dependencia de esteroides. Aunque la evidencia no es muy fuerte, se asocian los antifúngicos con la mejora de la función pulmonar y los marcadores serológicos. La experiencia actual es con itraconazol, aunque los otros azoles también son eficaces. El papel de los esteroides inhalados no está claro en la ABPA, excepto en el control del asma. La anfotericina B nebulizada se utiliza en la ABPA que complica la fibrosis quística. Por último, el omalizumab es un anticuerpo monoclonal anti-IgE que se utiliza con éxito en algunos pacientes con ABPA y CF.

Alveolitis alérgica extrínseca

Los casos de EAA causados por Aspergillus se reportan después de la exposición al heno mohoso, en los panaderos, los trabajadores de malta y después de la entrada en pozos excavados. Como se mencionó de forma previa, el diagnóstico diferencial puede incluir IA que requiere un tratamiento antifúngico. La misma exposición puede resultar ya sea para EAA o IA en diferentes personas. Es posible que la exposición masiva de esporas pueda resultar con más facilidad en la infección en lugar de una respuesta alérgica, o que ambas entidades puedan coexistir.

Colonización

El aislamiento de Aspergillus de muestras respiratorias inferiores sin evidencia de la enfermedad por Aspergillusse define como colonización. La distinción entre colonización y enfermedad se basa en el criterio clínico, aunque una señal más fuerte en una PCR cuantitativa puede indicar enfermedad en lugar de colonización. El riesgo de desarrollar la enfermedad clínica posterior a la colonización depende del grado de compromiso inmune del huésped. Por ejemplo, los receptores de trasplante de pulmón colonizados con Aspergillusen el periodo pretrasplante o en el primer año postrasplante tienen una incidencia alta del desarrollo eventual de IA y se les debe ofrecer profilaxis con azoles o anfotericina B inhalada.

Conclusiones

Los diversos síndromes clínicos causados por Aspergilluspueden verse como un espectro continuo de la enfermedad cuyas manifestaciones se definen por la interacción entre el patógeno y el huésped. Una forma de la enfermedad clínica puede evolucionar a otra con el tiempo y en función del grado de compromiso inmune del huésped. Se necesita más investigación con el fin de caracterizar mejor el alcance y la patogénesis de la enfermedad por Aspergillus infecciosa, alérgica y saprófita.

Autores: Chris KosmidisDavid W DenningThe clinical spectrum of pulmonary aspergillosis. Postgrad Med J 2015;91:403-410 doi:10.1136/postgradmedj-2014-206291rep

Fuente: SLaai

Un nuevo software permitirá reducir las infecciones hospitalarias

0

En general, los pacientes que contraen infecciones provocadas por bacterias denominadas habitualmente como fármacorresistentes tienen un peor pronóstico en el desarrollo de su enfermedad y un mayor riesgo de morir que las personas que están infectadas con bacterias de la misma especie pero sin que sean resistentes a dichos fármacos.

Esto, como es evidente, supone un grave problema para el control de estas infecciones. Por lo tanto, se necesitan con urgencia nuevas estrategias de diagnóstico que permitan dar un mejor uso a los antibióticos y, con ello, salvaguardar la eficacia tanto de los fármacos ya existentes como de los nuevos que se desarrollen en un futuro.

Un grupo de investigadores pertenecientes al Centro Wellcome Trust de Genética Humana de la Universidad de Oxford ha logrado implementar un nuevo programa de ordenador (Mykrobe Predictor) que posibilita el análisis rápido del ADN bacteriano. Esto permite predecir cuáles serían los antibióticos que mejor actuarían sobre dicha infección para poder combatirla y cuáles serían los antibióticos frente a los que esas bacterias han generado resistencias.

En qué consiste el proceso

Las infecciones asociadas a las estancias hospitalarias (infecciones nosocomiales) son las adquiridas por pacientes ingresados en hospitales, sobre todo, cuando padecen enfermedades que implican estancias largas o cuando se trata de pacientes que se encuentran en la unidad de cuidados intensivos.

Cada año, el tratamiento y la internación de pacientes en todo el mundo se complica a causa de infecciones contraídas durante la asistencia médica. De hecho, algunas personas enferman más gravemente por este tipo de infecciones hospitalarias que por las patologías con las que fueron ingresados. Otras, en cambio, alargan su estancia en el hospital y otras quedan discapacitadas por un largo período de tiempo o incluso mueren.

Estas graves consecuencias podrían minimizarse, según el equipo de investigación de Oxford, mediante el empleo del nuevo software que este grupo ha desarrollado. Este programa diseñado por el Dr. Zamin Iqbal y su equipo consiste en un programa de ordenador fácil de usar que puede ejecutarse en un ordenador portátil estándar o tablet y puede ser utilizado por una amplia variedad de profesionales sin experiencia en bioinformática.

Para determinar qué cepa de bacteria está causando la infección y frente a qué tipo de medicamentos es resistente, se llevan a cabo una serie de pruebas de sensibilidad. Para ello, lo que se hace es cultivar la bacteria que está provocando la infección en placas de cultivo. Sobre ellas se añade una batería de antibióticos. Esto permitirá observar cuáles de ellos han sido efectivos y, por tanto, han logrado eliminar o detener el crecimiento de las bacterias. De este modo queda claro que antibiótico será completamente efectivo.

Rapidez y efectividad en el proceso

El problema de todo el procedimiento descrito es el tiempo. Es un proceso que puede tardar días o incluso meses, en función de la rapidez o lentitud de crecimiento de las bacterias en las placas de cultivo. Además, si la bacteria porta alguna mutación que confiera resistencia, no puede ser detectada mediante esta tecnología.

Por lo que los científicos consideran que podría obtenerse gran cantidad de información, pero de forma más rápida, centrándose directamente en la secuencia del ADN bacteriano. Ésta es una técnica que tiene el potencial de transformar la forma de diagnosticar y tratar las infecciones bacterianas en los hospitales. Es más concreta y con su aplicación es posible la detección de posibles alteraciones genéticas responsables de las resistencias generadas frente a los antibióticos.

Sin embargo, la interpretación de la información genética obtenida requiere, a menudo, un gran potencial informático, así como, de especialistas con experiencia en bioinformática. Por tanto, el tiempo “perdido” en todo este proceso, puede ser causa de importantes fatalidades.

El software diseñado por este grupo de investigación agiliza todo este proceso mediante la automatización de análisis del genoma. Gestiona los datos obtenidos tras la secuenciación de una forma rápida. Concretamente, en menos de tres minutos genera un informe médico en el que se muestran los resultados de una forma sencilla de entender y en un ordenador portátil estándar. Esto les permite cotejar el genoma de la bacteria causante de la infección con el de cepas anteriores, iniciándose así la búsqueda de posibles mutaciones causantes de la resistencia.

Ventajas de Mycrobe predictor

Los investigadores realizaron el estudio en más de 4.500 muestras de pacientes, en el que comprobaron que el Mykrome predictor detectaba con precisión la resistencia a antibióticos en dos infecciones bacterianas potencialmente mortales, una causada por la bacteria responsable de infecciones nosocomiales (Staphylococcus aureus) y la otra la responsable de la tuberculosis (Mycobacterium tuberculosis).

Una de las principales ventajas del programa es que, incluso, puede identificar infecciones donde el cuerpo de un paciente contiene una mezcla de bacterias formada por bacterias fármacorresistentes y bacterias fármacosensibles. Esto supone una enorme ventaja sobre las pruebas convencionales, por ejemplo, para la detección de resistencia a fármacos de las bacterias causantes de la tuberculosis, resistente por lo menos a cuatro de los medicamentos básicos.

Todo esto trae consigo una mejora en la toma de decisiones, ya que serán más específicas y adecuadas, lo que, repercute directamente en la salud del paciente. De hecho, el software ya se está probando en tres hospitales de Gran Bretaña para estudiar si podría ayudar a acelerar el diagnóstico de las infecciones resistentes a los fármacos, lo que orientaría a los médicos a realizar una mejor prescripción de antibióticos.

Ahora, uno de los principales retos es desarrollar herramientas adecuadas para que se pueda desbloquear la información obtenida en la secuenciación del ADN de una forma rápida y asequible. Por lo que el objetivo final de este equipo, es proporcionar información completa sobre un patógeno dentro de las 24 horas de cultivo, vinculando esta información a una base de datos nacional que permita el tratamiento específico y adecuado para la eliminación de la infección de un paciente.

Puede consultar el artículo completo, en inglés, haciendo clic aquí.

Fuente: REC

La OPS ayuda a los países de las Américas a prepararse para enfrentar la propagación del virus Zika

0

La Organización Panamericana de la Salud/Organización Mundial de la Salud (OPS/OMS) está movilizando equipos de expertos internacionales para ayudar a los países miembros a prepararse para enfrentar los brotes de fiebre zika, ante la evidencia creciente que sugiere que puede estar relacionada con microcefalia en los recién nacidos.

Un equipo dirigido por el Dr. Marcos Espinal, Director del Departamento de Enfermedades Transmisibles de la OPS/OMS, se reunió en la República Dominicana la semana pasada con más de 2.000 funcionarios de salud, proveedores de servicios de salud, servicios de emergencia, académicos y especialistas médicos para discutir la amenaza de la fiebre zika y los pasos necesarios para prepararse para su potencial llegada y propagación.

“Al igual que el Chikungunya, el Zika es un nuevo virus para el que la población de las Américas no tiene ninguna inmunidad. Ya se ha extendido a 18 países de nuestra región, y el resto debe estar preparado para afrontar su propagación”, dijo Espinal.

De acuerdo a la actualización epidemiológica de la OPS/OMS del 17 de enero, los países y territorios que han confirmado hasta la fecha circulación local del virus Zika son: Brasil, Barbados, Colombia, Ecuador, El Salvador, Guatemala, Guayana, Guyana Francesa, Haití, Honduras, Martinique, México, Panamá, Paraguay, Puerto Rico, SaintMartin, Suriname y Venezuela. Este es el doble de países y territorios que reportaban tener casos de transmisión autóctona de virus Zika en la última actualización epidemiológica del 1 de diciembre de 2015.

El virus Zika es transmitido principalmente por los mosquitos Aedes, que también transmiten los virus Chikungunya y Dengue, y que están presentes en todos los países de las Américas, excepto Canadá y Chile continental.

Sólo una de cada cuatro personas infectadas con el virus Zika desarrolla síntomas, aunque a veces puede causar complicaciones graves en las personas infectadas. De mayor preocupación, sin embargo, es el presunto vínculo entre el virus Zika y un aumento en los casos de microcefalia en bebés nacidos de madres que fueron infectadas durante el embarazo. En Brasil, donde la fiebre zika fue confirmada en mayo de 2015, se han reportado más de 3.500 casos sospechosos de microcefalia en las áreas donde el virus está circulando.

“La relación de causalidad entre la infección por el virus Zika y la microcefalia aún no ha sido comprobada, pero la posibilidad de que este vinculada con el creciente número de estos casos hace que la fiebre zika sea considerada un urgente problema de salud pública. Es por eso que estamos trabajando con todos nuestros países miembros para que estén preparados para limitar el impacto de este virus tanto como sea posible”, dijo Espinal.
Con este fin, la OPS/OMS ha movilizado a su propio personal y miembros de la Red Mundial de Alerta y Respuesta a Brotes (GOARN) para ayudar a los ministerios de salud en el fortalecimiento de sus capacidades para detectar la llegada y la circulación del virus Zika a través de pruebas de laboratorio y la notificación rápida, para garantizar el diagnóstico clínico preciso y el tratamiento para los pacientes, para rastrear la propagación del virus y el mosquito portador, y para promover la prevención, sobre todo a través del control de mosquitos.

Además de las tres grandes sesiones informativas celebradas esta semana en la República Dominicana, la OPS/OMS también ha organizado sesiones de entrenamiento en estas áreas clave para los países de Centroamérica y el Cono Sur, y planes de formación para otros países de la región en un futuro próximo.

Además de la sesión informativa con funcionarios, expertos y proveedores de salud de esta semana en Santo Domingo, los representantes de la OPS/OMS también se reunieron con la ministro de Salud Altagracia Guzmán Marcelino y otros funcionarios del Ministerio de Salud para planificar la cooperación técnica entre la OPS/OMS y el país y definir los próximos pasos.

La OPS recomienda monitorear síndromes neurológicos y anomalías congénitas

La OPS/OMS está recomendando a sus países miembros monitorear y notificar cualquier aumento de síndromes neurológicos y anomalías congénitas.

La OPS/OMS también llama a los países de las Américas a preparar sus servicios de salud para responder a un aumento potencial de la demanda de servicios especializados por síndromes neurológicos, a fortalecer el cuidado prenatal, y a continuar con los esfuerzos por reducir la presencia del mosquito que transmite el virus, a través de una estrategia efectiva de control del vector y una buena comunicación con la población.

Los últimos países que informaron casos

  • Guayana: El 14 de enero, el Centro Nacional de Enlace (CNE) para el Reglamento Sanitario Internacional (RSI) de Guayana reportó el primer caso confirmado por laboratorio de infección por el virus Zika adquirida localmente. Se trata de una mujer de 27 años de edad de Berbice, Región 6, con inicio de síntomas el 1 de enero. Se recogieron muestras de la paciente el 4 de enero y se enviaron al laboratorio de la Agencia de Salud Pública del Caribe (CARPHA) en Trinidad and Tobago para su análisis. El caso fue confirmado por reacción en cadena de la polimerasa (PCR).
  • Barbados: El 15 de enero, el CNE de Barbados informó los primeros tres casos confirmados por laboratorio de infección por el virus Zika adquirida localmente. Ninguno de los casos tenía antecedentes de viajes. Se enviaron muestras de los pacientes al laboratorio de la CARPHA para su análisis. Los casos fueron confirmados por PCR.
  • Ecuador: El 15 de enero, el CNE de Ecuador reportó dos casos confirmados por laboratorio de infección por el virus Zika adquirida localmente. Hasta el 16 de enero se había reportado un total de seis casos: dos de los casos fueron adquiridos localmente, mientras que los cuatro casos restantes fueron importados (tres de Colombia y uno de Venezuela). Se tomaron muestras de todos los casos, las que fueron enviadas al Instituto Nacional de Salud Pública e Investigación, en Guayaquil, para su análisis. Todos los casos fueron positivos por PCR para virus Zika y negativo para los virus Dengue y Chikungunya.
  • Bolivia: El 16 de enero, el Ministerio de Salud de Bolivia, a través de su CNE, notificó el primer caso confirmado por laboratorio de infección por el virus Zika adquirida localmente. Se trata de una mujer de 32 años de edad, embarazada, oriunda de Portachuelo, Departamento de Santa Cruz, con inicio de síntomas el 8 de enero. No tiene historia reciente de viajes. El 12 de enero se enviaron muestras de la paciente al Centro Nacional de Enfermedades Tropicales para su análisis. El 14 de enero, el caso fue confirmado por PCR.
  • Haití: El 18 de enero, el CNE de Haití notificó cinco casos confirmados por laboratorio de infección por el virus Zika. De los cinco casos confirmados, cuatro son de la comuna de Delmas, mientras que el caso restante es de la comuna de PétionVille. Se enviaron muestras de los paciente al laboratorio de la CARPHA en Trinidad and Tobago para su análisis. Todos los casos fueron confirmados por reacción en cadena de la polimerasa con transcriptasa inversa (RTPCR). Además, entre el 4 y el 12 de enero de 2016, el CNE de Alemania notificó dos casos de infección por el virus Zika en ciudadanos alemanes que habían regresado desde Haití hacia Alemania a fines de diciembre. Se recogieron muestras de ambos pacientes, las que fueron enviadas para su análisis de laboratorio al centro nacional de referencia para enfermedades tropicales en Alemania. Mientras que uno de los casos fue confirmado tanto por RTPCR como por serología, el otro fue confirmada sólo por serología.
  • SaintMartin: El 18 de enero, el CNE de Francia notificó el primer caso confirmado por laboratorio de infección por virus Zika adquirida localmente en SaintMartin, un departamento de ultramar de Francia.
  • Guadeloupe: El 18 de enero, el CNE de Francia notificó el primer caso confirmado por laboratorio de infección por virus Zika adquirida localmente en Guadeloupe, un departamento de ultramar de Francia.

Síndrome de GuillainBarré en El Salvador

El CNE de El Salvador notificó a la OPS/OMS un aumento inusual de casos de síndrome de GuillainBarré (SGB) en el país. En El Salvador, el promedio anual de casos de SGB es 169; sin embargo, desde el 1 de diciembre de 2015 hasta el 6 enero de 2016, se registraron 46 casos de SGB, incluyendo dos muertes.

De los 46 casos de SGB, 25 (54%) son hombres y 35 (76%) son de 30 años de edad o más. Todos los casos fueron hospitalizados y tratados con plasmaféresis o inmunoglobulina intravenosa. Uno de los dos pacientes fallecidos tenía un historial de múltiples enfermedades crónicas subyacentes. De los 22 pacientes cuya información estaba disponible, 12 (54%) presentaron enfermedad eruptiva febril en los 15 días anteriores a la aparición de síntomas compatibles con SGB.

Las investigaciones están en curso para determinar la causa de la infección y adquirir más información sobre el diagnóstico de laboratorio. También se están investigando posibles asociaciones entre el SGB y la infección por el virus Zika. Desde la confirmación del primer caso de infección por el virus Zika en noviembre de 2015 hasta el 31 de diciembre de 2015, las autoridades sanitarias salvadoreñas reportaron 3.836 casos sospechosos de infección por el virus Zika.

Fuente: REC

Cambios moleculares en la hemaglutinina contribuyeron a la emergencia de la pandemia de influenza A(H1N1) de 2009

0

Científicos del Hospital de Investigación Infantil St. Jude, Estados Unidos, han identificado una propiedad molecular de la proteína hemaglutinina que contribuyó a la aparición del virus de la influenza A(H1N1) que causó la pandemia de 2009. Los hallazgos podrían ayudar a los profesionales a reconocer y controlar los virus de la influenza que representan mayor riesgo para los humanos.

La hemaglutinina se fabrica en la superficie del virus de la influenza, que la necesita para unirse e infectar a las células huésped. Los investigadores demostraron que la hemaglutinina se volvió más estable en un medio ácido como el virus A(H1N1) que pasó de los cerdos a los humanos. La adaptación aumentó la estabilidad de la proteína en condiciones ácidas del tracto respiratorio humano y redujo el pH en el que la hemaglutinina se activó. La activación desencadenó un cambio irreversible en la forma molecular de la proteína que fusiona las células del virus y de destino.

Los investigadores demostraron en el laboratorio que la adaptación de la hemaglutinina era esencial para la transmisión viral por el aire en los hurones, el modelo animal de la enfermedad humana. Activar la mutación de la hemaglutinina que reduce la estabilidad de la proteína en ácido y aumenta el pH bloqueó la capacidad del virus para propagarse a través de partículas en el aire.

“Hemos identificado la estabilidad de la hemaglutinina en el ácido como una propiedad esencial de los virus pandémicos. Estos hallazgos deberían ayudar a prepararse para una pandemia, ayudando a los profesionales sanitarios a reconocer y dar prioridad a los virus circulantes de origen animal con el fin de vigilar, producir vacunas y tomar otras medidas”, subrayó Charles Russell, miembro asociado del Departamento de Enfermedades Infecciosas, que dirigió la investigación de St. Jude.

Un pH de 5,5 para una pandemia de influenza A

El pH de activación es diferente para los distintos virus de la influenza: los virus aviares y porcinos se activan con un pH de 5,5 a 6,0, en comparación con pH de 5,0 a 5,5 para los virus de la influenza humana. Estudios anteriores de Russell y otros expertos mostraron que la modificación de la hemaglutinina para reducir la estabilidad de la proteína en ácido y disminuir su pH de activación lleva a la transmisión del virus de la influenza aviar en ratones y hurones. Ahora, los autores del trabajo han relacionado estos cambios en un virus pandémico humano.

En este estudio, los investigadores rastrearon el pH de activación en los virus de la influenza porcina A(H1N1), antes y durante la pandemia de influenza de 2009. Antes de la pandemia, los virus porcinos A(H1N1) se activaron a niveles de pH de 5,56,0. El virus A(H1N1) que infectó a los seres humanos a principios de la pandemia fue activado a un pH de 5,5 y, en casos posteriores, el pH de activación del virus pandémico A(H1N1) fue de entre 5,2 y 5,4.

“La proteína hemaglutinina desempeña un papel central en las pandemias de influenza humana, sin embargo, hasta ahora las propiedades moleculares necesarias para virus pandémicos han permanecido en gran medida sin definir. Nuestros hallazgos sugieren que uno de los requisitos para una pandemia por virus de influenza A era una proteína de estabilización ácida con un pH de activación de 5,5 o menos, lo que fue suficiente para permitir transmisión aérea humano a humano al inicio de la pandemia de A(H1N1) en 2009”, señaló Russell.

Cuando los científicos mutaron el virus pandémico A(H1N1) de 2009 para que fuera más como el virus de la influenza porcina y darle una hemaglutinina con un pH de activación superior, el virus causó menos enfermedades y se extendió más lentamente en ratones y hurones.

El virus respondió a la mutación de pérdida de función mediante la alteración de la hemaglutinina rápidamente en el laboratorio a un menor pH de activación de 5,3. El cambio espontáneo restauró la transmisibilidad por el aire del virus en hurones y un análisis de muestras de A(H1N1) pandémica recogidas de más de 21.000 casos humanos en el mundo encontró un número pequeño con la misma mutación H1.

“El cambio en la forma de la hemaglutinina que provoca la fusión de la membrana y lleva el material genético viral a las células diana se desencadena por una caída en el pH. El virus puede estar expuesto a bajos pH en el tracto respiratorio superior ligeramente ácido de los seres humanos y otros mamíferos. Si es demasiado fácil que se desencadene la hemaglutinina, es como una trampa de ratón prematuramente activada y el virus se inactiva antes de llegar a la célula diana”, resumió Russell.

Puede consultar el artículo completo, en inglés, haciendo clic aquí (requiere suscripción).

Fuente: REC

Trombofilia: ¿Cómo y cuándo se estudia?

0

Trombosis

La trombosis es la formación de un coágulo en el interior de las venas o de las arterias. Este fenómeno ocurre cuando se pierde el equilibrio hemostático entre los factores protrombóticos (hemostasia primaria y factores de coagulación) y los factores antitrombóticos (sistema fibrinólitico e inhibidores fisiológicos de la coagulación).

Las manifestaciones clínicas de la trombosis son variadas y dependen del sitio donde ocurre el evento, en el caso de las trombosis venosas  pueden presentarse como trombosis venosa profunda, tromboembolismo pulmonar (TEP), accidente cerebro vascular (ACV), entre otras. Mientras que las trombosis arteriales pueden presentarse como un infarto agudo de miocardio, ACV o trombosis en sitios atípicos, entre otras. La mayoría de las trombosis arteriales ocurren en el contexto de aterosclerosis, cuando sucede la ruptura de una placa ateroesclerótica hay exposición del subendotelio y formación del trombo a nivel de la intima, el cual puede invadir la luz vascular.

La triada de Virchow propone que la trombosis puede ser causada por cambios en la pared del vaso, el flujo sanguíneo o la composición química de la sangre.

Factores de Riesgo Trombótico para Trombosis Venosa (TEV)

Primarios: Alteraciones de  la hemostasia, generalmente hereditarias que afectan algún componente de la coagulación o de la fibrinólisis, y que se asocian con la aparición de trombosis. Prevalencia 1 de cada 3000 a 5000 habitantes de la población general.

Secundarios: Situaciones clínicas asociadas a un riesgo aumentado de trombosis. La trombosis en este caso tiene un origen complejo y multifactorial (colagenopatias (inflamación del endotelio: lupus eritematoso sistémico), neoplasias, fármacos, insuficiencia cardiaca, diabetes, cirugía, traumatismo, inmovilización, edad/sexo, TEV previo, catéteres venosos o arteriales, falla respiratoria, síndrome nefrótico, obesidad, tabaquismo, venas varicosas, embarazo, posparto, terapia hormonal, infección aguda).

Factores del individuo: Los hombres tienen 1,6 – 3,6 mayor riesgo que las mujeres a trombosis venosas recurrentes. A partir de los 60 años aumenta el riesgo de TV porque las paredes de los vasos están envejecidas. Los grupos ABO no 0 tienen mayor riesgo de TEP que el grupo 0 porque sintetizan mayor cantidad de FvW y FVIII.

Factores de Riesgo Trombótico para Trombosis Arterial (TA)

Factores de riesgo clásicos: Edad (mayor edad, mayor riesgo), hipertensión arterial (HTA, principal factor de riesgo para desarrollo y progresión de enfermedad arterial), hipercolesterolemia (riesgo semejante a enfermedad coronaria), diabetes (depende de los niveles de glucosa) y tabaquismo (contribuye por múltiples factores).

Factores de riesgo no tradicionales I: Subfracciones de triglicéridos y LDL ricos en lipopropteínas, Lpa, LDL-Oxidadas, moléculas de adhesión, PAI-1-tPA, Fibrinógeno, nitritos/nitratos, agentes infecciosos.

Factores de riesgo no tradicionales II: Trombofilia adquirida, trombofilia hereditaria y otros (SMP: PV/TE, Cancer, anticonceptivos orales, trauma quirúrgico)

Trombofilia

Es un desorden del mecanismo hemostático donde se demuestra una predisposición anormal a la trombosis. Puede manifestarse como un evento tromboembólico espontaneo o de una severidad desproporcionada al estímulo, en el territorio venoso y ocasionalmente arterial, con una tendencia variable a la recurrencia. La presencia de este factor predisponente no implica necesariamente la aparición de un evento trombótico. La enfermedad trombótica es multifactorial como resultado de la conjunción de varios factores, genéticos, ambientales y de condiciones adquiridas que determinan la expresión clínica individual. Deben tenerse en cuenta siempre enfermedades sistémicas que pueden asociarse o predisponer a eventos trombóticos: neoplasias hematológicas y no hematológicas, hemoglobinuria paroxística noctura, síndrome nefrótico, enfermedad inflamatoria intestinal, enfermedades autoinmunes, etc. Algunos tratamientos específicos también predisponen a la trombosis: l-aparaginasa, talidomida, hormonoterapia, etc.

Se clasifican en:

Hereditaria Adquirida
Deficiencia de Proteína C (PC)

Deficiencia de Proteína S (PS)

Deficiencia deAantitrombina III (AT)

Factor V de Leiden (FVL)

Mutación p20210 del gen Protrombina

Polimorfismo PAI-1 4G/5G

MTHFR 677TT

Anticoagulante Lúpico

Anticuerpos Antifosfolípidos

Anticuerpos Anti β2 GPI

Hiperhomocisteinemia (HHCY)

Aumento de PAI-1

Resistencia a la Proteína C Activada (RPCa) Adquirida

Según el riesgo trombótico asociado, se clasifican en:

clasificación

SAF: Síndrome antifosfolipídico.

Existen ciertas alteraciones como el polimorfismo del promotor del gen del PAI, la prueba de la respuesta fibrinolítica a la isquemia, la variante termolábil de la MTHFR, el aumento de los factores VII, VIII, IX y XI, polimorfismos del FXIII, polimorfismos de glicoproteínas de membrana plaquetaria y LPa que si bien han mostrado en estudios individuales alguna relación con la patología trombótica, no hay suficiente evidencia que justifique incluirlas en el algoritmo de estudio de pacientes con sospecha de trombofilia.

Trombofilia y TE Arterial

  • Menos prevalente que TEV
  • La trombofilia explica solo 1/3 de los eventos arteriales en < 45 años
  • Principalmente asociada a SAF, sindromes mieloproliferativos o Hiperhomocisteinemias.
  • Influyen más los factores de riesgo clásicos (Historia familiar, HTA, tabaco, obesidad y diabetes).

¿A quiénes estudiar?

  • Trombosis venosa 1° evento espontaneo o desproporcionado a factor desencadenante
  • Menor de 40 años
  • Historia familiar significativa
  • Sitio inusual (vena central y/o ramas de la retina, trombosis venosa esplácnica, trombosis en senos venosos cerebrales)
  • Trombosis venosa superficial recurrente sin causa antes de los 50 años.
  • Purpura fulminans o necrosis cutánea por antagonistas de Vitamina K
  • TEV asociado a terapia hormonal o embarazo y/o puerperio
  • Mujer con 2 o más abortos espontáneos de menos de 10 semanas o un aborto de más de 10 semanas.
  • ACO con ETV, paciente joven
  • Familia de trombofilia de alto riesgo hereditaria
  • Niños asintomáticos con historia familiar positiva
  • Trombosis arteriales en pediatría
  • Niños y adolescentes con TEV
  • IAM en mujeres sin FR y hombres jóvenes

¿Cuándo estudiar?

No se debe estudiar en momento agudo, durante anticoagulación con dicumarínicos o heparina, no antes de los 90 días postparto, no antes de 30 días desde la suspensión de la terapia hormonal.

Estudiar al menos 3 meses después del evento trombótico.

Todo resultado anormal deberá confirmarse con una nueva muestra (excepto estudios de biología molecular).

En caso de un resultado positivo en población pediátrica, se debe considerar estudiar a los padres para corroborar el diagnóstico.

Mujeres asintomáticas que intentan embarazo o requieren terapia hormonal (estrogénica), con familiares en primer grado con trombofilia hereditaria conocida sintomática.

En población pediátrica asintomática con historia familiar de trombosis a edades tempranas: debe ser considerado el estudio individual.

¿Cómo se estudian?

Las prácticas a ser solicitadas por el profesional dependen de la presentación clínica del evento trombótico, ya que algunas causas adquiridas o genéticas se encuentran asociadas con un evento clínico en particular.

Desde el área de Hemostasia y Trombosis del laboratorio de análisis clínico se estudian en sangre las causas adquiridas:

  • Inhibidor lupico
  • Anticuerpos anticardiolipinas IgG e IgM
  • Anticuerpos antiB2-glicoproteína I IgG e IgM
  • Estos tres prácticas forman parte del estudio del Síndrome antifosfolipídico.
  • Homocisteina en sangre
  • PAI-1 Funcional
  • Resistencia a la proteína C adquirida

Y las causas genéticas:

  • Factor V de Leiden
  • Mutación del gen de la protrombina p20210
  • Mutación del MTHFR
  • Mutación del PAI 4G/5G
  • Proteína C
  • Proteína S
  • Antitrombina III
  • Factor VIII

Los resultados del laboratorio deben ser evaluados por el profesional que los solicitó, junto con la historia clínica del paciente para llegar al diagnóstico correcto.

Autor: Dra. Dolores Gagey – Jefa Área Hemostasia y Trombosis – Fares Taie Instituto de Análisis

Fuente: Fares Taie Instituto de Análisis

Agenda

     

Radio El Microscopio

Últimas notas publicadas